"Fue en España donde mi generación aprendió que uno puede tener razón y ser derrotado, que la fuerza puede destruir el alma, y que a veces el coraje no obtiene recompensa"
Tristes palabras de Camus, que a pesar de ser un apasionado de la Guerra Civil Española, no conocía. Esta frase expresa lo que a mi modo de ver, fue quizá lo más triste de esa guerra: la derrota de la ilusión, de la esperanza, de la libertad, y en suma, del progreso frente a la oscuridad.
Y desgraciadamente, quizá es aún más triste descubrir que en lugar de constituir una lección histórica inolvidable, aún haya quién ni siquiera lo ve como la brutal barbarie que fue y que incluso se llegue al punto de justificarla, o peor aún, considerar que fue "necesaria". Y miedo deberíamos tener de esta gente que no anda precisamente por desiertos remotos ni montañas lejanas, sino en determinados periódicos y emisoras de radio que todos conocemos muy bien. Ahora que aún estamos a tiempo, la Fiscalía del Estado debería actuar de forma responsable e impedir que estos medios de comunicación puedan dedicarse tan tranquilamente a calumniar, mentir, manipular, falsear, crispar, amenazar y muchas veces incluso a hacer apología del terrorismo y la violencia sin que nadie se atreva a pararles los pies. Así que ya va siendo hora de que alguien haga algo. Todos sabemos lo que ocurrió la última vez que se les dejó hacer y no se les paró a tiempo.
Y desgraciadamente, quizá es aún más triste descubrir que en lugar de constituir una lección histórica inolvidable, aún haya quién ni siquiera lo ve como la brutal barbarie que fue y que incluso se llegue al punto de justificarla, o peor aún, considerar que fue "necesaria". Y miedo deberíamos tener de esta gente que no anda precisamente por desiertos remotos ni montañas lejanas, sino en determinados periódicos y emisoras de radio que todos conocemos muy bien. Ahora que aún estamos a tiempo, la Fiscalía del Estado debería actuar de forma responsable e impedir que estos medios de comunicación puedan dedicarse tan tranquilamente a calumniar, mentir, manipular, falsear, crispar, amenazar y muchas veces incluso a hacer apología del terrorismo y la violencia sin que nadie se atreva a pararles los pies. Así que ya va siendo hora de que alguien haga algo. Todos sabemos lo que ocurrió la última vez que se les dejó hacer y no se les paró a tiempo.
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